BIG FISH
(Por Luis MC)
– FICHA TÉCNICA –
Año: 2003.
Director: Tim Burton.
Reparto principal: Ewan McGregor, Albert Finney, Jessica Lange, Billy Crudup, Helena Bonham Carter, Marion Cotillard.
Género: Comedia / Drama.
– SINÓPSIS –
Edward Bloom (Ewan McGregor/Albert Finney) es un afamado cuenta cuentos aficionado, que ha pasado su vida de un lado para otro en busca del éxito, viviendo aventuras y conociendo mundo, hasta que muchos años después, inmerso en la vejez, pasa sus últimos tiempos apaciblemente junto a su fiel mujer (Jessica Lange).
Con sus inverosímiles historias, Edward es capaz de ganarse el corazón y la sonrisa de cualquiera que le escuche, de cualquiera, excepto de su único hijo William (Billy Crudup).
William, chico mucho más serio e introvertido que su carismático progenitor, está gravemente disgustado con éste por un motivo concreto: Tras muchos años de verle engatusar a todo el mundo con sus interesantes y (supuestamente) verídicas historias, ha captado las variaciones y lagunas que frecuentemente surgen al narrarlas, con lo que ahora tiene la seria convicción de que su padre es un farsante, sintiendo una gran decepción.
La situación llega a su punto álgido el día de la boda de William, cuando se enfada terriblemente con Edward por acaparar la atención de los invitados relegando casi a un segundo plano la celebración.
Después de mucho tiempo sin que uno y otro se dirijan la palabra, la esposa de Edward presiona a su hijo para que se den una segunda oportunidad. En ese momento William comenzará a recordar, entrelazar y analizar todas las historias de Edward, y así emprenderá un mágico viaje en busca de importantes conclusiones que le llevarán a descubrir si su padre es realmente el gran Edward Bloom a quién todos admiran, o sólo un fraudulento vendedor de mitos que estafa a la gente con sus fantasías.
– CRÍTICA –
Lo primero que merece la pena reseñar, es el a veces injusto juicio de la crítica americana, que dejó ésta pieza de orfebrería sin ningún premio de la academia, ignorándola en la ceremonia de los Oscars y enterrándola con una escueta e indolente nominación al mejor guión original.
Señalo ese detalle porque Big Fish, posiblemente sea una de las diez mejores películas que yo haya visto en toda mi vida.
El director, Tim Burton, un confeso aficionado a fusionar realidad y mundo mágico en todos sus films, consigue aquí darle una nueva y refrescante dimensión al perfil del típico cuenta cuentos de toda la vida.
A lo largo del metraje, Burton despliega un increíble y trabajado show de prestidigitación, juega a la inversa en una inteligente propuesta que mitifica la realidad y normaliza la leyenda, al punto de hacer que el espectador llegue a desear que todo lo que envuelve la vida del protagonista sea real de puro bello.
La contraposición entre la filosofía de vida y puntos de vista del joven Edward frente a los de todos los demás personajes, logra que uno mismo pueda darse cuenta de lo fácil que resulta confundir lo siniestro con lo descuidado, lo malvado con lo triste, la inadaptación con la soledad y sobre todo, la innegable necesidad que tiene cualquier ser humano de que otro se acerque a él, y a pesar de su aspecto, miserias o defectos, intente conocerle sin temor.
Big Fish es simplemente un cuento sobre los mismos cuentos, explicado magistralmente por alguien que los ama con toda su alma.
Jamás pretende abusar de la madurez o la razón del espectador, sino que saca una moneda de detrás de nuestra oreja y aunque sepamos que nunca estuvo ahí, no por ello deja de lograr el inocente propósito de robarle una sonrisa ilusionada al niño que todos llevamos dentro.
Ésta película, para mí la joya de la corona en la trayectoria de Burton, es una reflexión sobre si es mejor derrumbar un mito que quizá no sea cierto, o a lo mejor es preferible respetar la supuesta realidad de alguien que consigue hacernos soñar con que a veces lo mágico puede tener una buena parte de realidad.
Definitivamente, Big Fish es una hermosa película para todos los públicos y edades, aunque la recomiendo encarecidamente a todos aquell@s niñ@s grandes que disfrutan de vez en cuando, correteando entre la inocencia que guardan en su interior.
– ¿POR QUÉ DEBERÍA VER ÉSTA PELÍCULA? –
*Dado como está el cine de hoy en día, ésta es una de esas películas casi extintas que consiguen que te vayas a la cama con la reconfortante sensación de que mientras haya gente capaz de hacernos soñar, éste mundo no será tan malo.
*Todo el elenco de actores está fantástico en sus registros, desde la estrella principal, hasta los personajes que apenas gozan de minutos a lo largo las pequeñas historias.
*La sutil banda sonora está compuesta en su totalidad por el eminente Danny Elfman, que viene siendo el «Steven Spielberg de la música de ambientación». Es tan genial, que uno apenas la nota durante la película, pero luego puede pasarse horas escuchándola en su cabeza.
– ¿QUÉ DEBO PERDONARLE A ÉSTA PELÍCULA? –
*Como ya he dicho, se trata de una de las obras maestras del cine a las que profeso mi más sentida admiración, de modo que me resulta complicado sacarle fallos reseñables, sin embargo, si tengo que censurar algo por irrelevante que sea, diré que en su comienzo, quizá tarda demasiado en introducirnos en el verdadero sentido del film y el espectador podría sentirse un poco desconcertando antes de captar por dónde va el hilo argumental.
– ENLACE AL TRAILER:
(El trailer sólo esta disponible en versión original)
– ENLACE AL TEMA MUSICAL PRINCIPAL: