Comenzamos con nuestro nuevo apartado para el recuerdo.

La evolución de Villoria con el paso de los años ha sido notable y notoria. De ello nos hemos hecho eco a largo de los, ya casi, cuarenta años que vio la luz la primera publicación de Besana. A partir de ahora y periódicamente, os iremos contando las distintas actividades comerciales o de otra índole,ya desaparecidas, habidas en Villoria, así como su ubicación y quienes eran los que las regentaban.
Cualquier aportación o rectificación por vuestra parte, será bien recibida.
Dadnos tiempo que, poco a poco, irán apareciendo todas ellas.
Ayer comenzamos con tres lugares muy conocidos y frecuentados en su época.
Como bien habéis comentado, esos tres lugares a los que os pedíamos identificar son:
-La cantina-comercio del Sr.Arístides y la Sra.Librada, situado en la plaza Mayor,era además una pequeña tienda donde se vendían alimentos más que nada envasados: arroz, fideos, escabeche, aceitunas, pimentón, tripas para la matanza, etc. Además, parece ser, según comentáis, que vivió alguien que era zapatero.
-El bar del sr. Avelino, al que le sucedió su hijo, Avelino también, situado en la carretera , muy cerca de la farmacia, entonces regentada por doña Nati. Lugar de chateo durante los años 50 y 60 y donde el escabeche con aceitunas barranqueñas, era una de las delicias que se degustaban acompañadas del vasito de vino de cosecha o comprado.
-Y la tienda del sr. Juanito y Adelina, situada en la calle Luceros. Una tienda de ultramarinos bien abastecida de alimento de todo tipo que se vendían al peso, básicamente, y ese chocolate imprescindible para la merienda que se vendía por «libras y medias libras» .

La próxima semana más.