Besana Villoria – Revista digital Besana de Villoria

UN LUGAR DONDE PODERLOS REZAR


Hoy me he concienciado y tras mucho tiempo, he decido comentar lo siguiente: Con la festividad de Todos los Santos, he recordado a los bebés abortados y a las víctimas del terrorismo. Pero no se me pasó por la mente aquellos que fueron fusilados en cada uno los dos bandos de nuestra guerra civil española.

Tengo el corazón helado al ver algunas imágenes de familiares que no pudieron ir a la tumba sus muertos el 1 de noviembre porque no saben donde están sus cadáveres y ni siquera tienen un acta de defunción. Figuran como desaparecidos. Da igual de la ideología que fuesen. Pero ir a buscar una persona a la puerta de su casa, llevársela, sin que se haya vuelto a saber de su paradero y que rece como desaparecida hasta el día de hoy, me parece muy fuerte. Sin embargo, otros que fueron fusilados se les compensó a las familias, recibieron un entierro justo y un certificado de defunción. Los países de que participaron en la II guerra mundial solucionaron esos problemas. Nosotros no.

Machado tenía razón cuando recitaba lo siguiente: Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios, una de las dos Españas ha de helarte el corazón.

Inés García

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