Besana Villoria – Revista digital Besana de Villoria

CON CALOR HAY VIDA..


…Y CON FRÍO Y SIN TRABAJO, MALA LECHE
Alfonso «EL PINDOQUE»
Seguramente este invierno ha sido el más apático de mi vida, no ha sido porque yo personalmente lo haya pasado mal, pero en los años que tengo nunca he oído tantas lamentaciones. Ahora mismo llego a casa después de andar ocho kilómetros, me encuentro a unos jóvenes en el camino, nos paramos y les pregunto ¿donde andáis que hace tiempo que no os veía? y me contestan, andando como tú, y nunca mejor dicho.

La tarde está para moverse porque parece que se han ido las nubes y las lluvias, estamos a 15 de abril y las gentes se ponen en movimiento, los agricultores haciendo sus faenas, los que pueden entrar en las tierras, y estamos lo que queremos perder kilos de este invierno aletargado. Pues todo ser viviente sale a disfrutar de estos días tan hermosos ya que nos vemos los vecinos y todo quisqui, porque este invierno nos hemos visto poco, creo que todos nos necesitamos. En la calle hablamos, nos trasmitimos lo que llevamos dentro y muchas inquietudes, que es el pan nuestro de cada día, donde nos están torpedeando todos los medios de comunicación sin encontrar una solución metiéndonos mentiras como a tontos, que ya les vale, ¿cuándo van a dejar de robar?, ¡devuelvan lo que han robado!, no se refugien en el poder y al trullo sea quien sea y que la justicia le eche un par de pelotas, si no esto va a ser catastrófico.

Que se enteren de una vez, que la gente lo que quiere es trabajar, que ya estoy harto de decirlo, si no, se les va olvidar estudiar y trabajar,¡ basta ya !. Dicen ustedes que la prima de riesgo baja, que si el Euribor va mejor, pero cuando se van a dar cuenta de que tenemos más de seis millones de parados. Muchas familias sobreviven que es un milagro porque ninguno trabaja de los que están en casa. Vamos a ser coherentes y no digan que estas medidas las han tenido que tomar y que están funcionando y a esperar el viernes de dolor, que no se dan cuenta que esto es muy grave y la gente se va a tirar a la calle y vamos a llorar todos. Luchen para dar puestos de trabajo, que esto es lo que salva a España, no para destruirlos, me remito a las pruebas. Así que el cáncer más grande que tenemos son los políticos y encima sacando algunos pecho, diciendo que son inocentes y muchos como borregos apoyándoles.

Lo que más pena me da es de estos jóvenes paseando, que como esto siga así creo que nos vamos a ver muchas veces por desgracia. No quiero endemoniarme porque no voy a adelantar nada. Seguro que vosotros pasareis en el Caribe buenas vacaciones con buenas playas y nadie os quitará el butacón, que así gobernaría yo.

Vamos a ver como desmenuzo yo lo que intento contaros. Yo siempre he dicho que el sol da vida, si no ahí están los andaluces con esa gracia cuando hablan, cuando bailan en sus chiringuitos, preparándose los trajes para estos días señalados de fiestas, en las calles y casetas. Los que pueden «apatuscan» a sus hijos y nietos, con sus trajes tan preciosos, pero claro estos los que pueden lucirlos, porque hay mucha gente que lo estará pasando mal y por la noche ya está la juerga. Pero antes de la noche, los que pueden van a la Maestranza a ver las corridas de toros. Las mujeres ataviadas con sus lindos trajes, enseñando sus espaldas y el canalillo de sus pechos, que en estos tiempos tan difíciles se alegra un poco la vista. Los hombres yo diría más bien los señoritos, con sus trajes bien planchados y su sombrero para que no les dé el sol, al lado de una hermosa niña ya criada como la del señor Rajoy, pavoneándose con sus puros entre los dedos y labios que yo creo que hasta Sara Montiel también lo hacía, porque esto lo hace hasta Morante de la Puebla, en el descanso. No importa que caliente.

Decía Hemingway, toros con calor, mujeres y hombres también, ahí está la furia de la fiesta, no con frío. Donde sus cuerpos están sudorosos, es el encanto de la fiesta. También lo decía Orson Wells en su barrera y el descubridor del Cordobés, El Pipo. Con sus puros que eran más largos que el cuerno de un toro, se les veía bien, siempre en barrera.

Los humildes al gallinero y allí la televisión no se molesta en sacar imágenes porque allí no hay caché.

Venían monumentos de mujeres, como Ava Gardner, donde desde la barrera ojeaba y ligaba la pieza para la noche, que sería para ella, como le pasó a Manolo de Vega, a este fue solo una noche que le marcó toda su vida, también a Mario Clavel, que fué torero y escritor; fué una deborahombres. Estuvieron toda la noche descabellando, en un lecho a cuerpo descubierto, eran jóvenes como torbellinos y también se comenta que si «El Fari», éste era un poco feo, no sé. Pero al que más toreó esta señorita fue a Luis Miguel Dominguín, con este tuvo muchas corridas, que luego lo parló diciendo que si no lo cuenta nadie sabría que hubieran tenido tantos encuentros los dos juntos. Según dicen de esta mujer que era la más guapa del mundo, que por cierto estaba loca por el torero, donde tuvo de todo y no llegó a ser feliz.

Pues a esta Andalucía venían, como también a los San Fermines, a San Isidro, toda la nata del mundo como Frank Sinatra que luego fue su marido. Venían también Burt lancaster, Kirk Douglas, Anthony Queen, Gregory Peck, Charlton Heston que corría en los San Fermines, Yul Brynner, Gary Grant , …etc . Venían porque Andalucía es un vergel, tenían comida, bebida calor, playas, buena gente. Las noches a bailar sevillanas en las casetas y el desmadre con sexo incluido. Así que por Andalucía pasaban toda clase de personas que seguirán viniendo si no han cascado el peine.

El que no volvió a España en aquellos tiempos cuando era joven fue Frank Sinatra, que vino a pasarse unas vacaciones y se hospedó en el mejor hotel que se construyó por parte del dictador. Se conoce que preparó una pirula y los caciques del dictador a la mañana siguiente, le pusieron las maletas en las escaleras de un avión, diciendo que nunca volvería a la España de los dictadores, porque fue expulsado. Pero como la vida no termina en una vida sola, siguen viniendo toda clase de gentes, porque Andalucía tiene algo especial, como dice el cantar y lo que más admiran de España es el sol, porque te da vida. Ves luz y es lo que nos está pasando ahora a nosotros que somos unos privilegiados porque creo que estamos en el mejor rincón del mundo, viendo las calamidades con los temporales de este invierno, pones la televisión y todo son desgracias. Así que te agarras con todas tus fuerzas a lo que te brinda la vida y a esperar a septiembre para irme a Benidorm ocho días, que paso a tope, os cuento. No sé si será el sol o el olor del salitre del mar, pero allí vamos todos los carrozas donde lo pasamos pipa. Gente mayor donde encuentran sus romances y son felices unos días y es debido a que allí vas a relajarte. Te juntas con amigos y de lo que más se habla es de sexo, con el máximo respeto que es cuando se ríe uno, porque si te hablan de muertos ya te dieron las vacaciones.

El sol te da vida, estamos más contentos y funciona mejor tu cuerpo porque llevamos menos ropa y si te das por la noche algún sofocón, coges un poco de aire no te puedes enfriar, porque con esto no te va a dar un infarto.

El otro día me encontré a un amigo de un pueblo cercano al mío, que algunas veces nos hemos visto en Benidorm, le dije ¿que tal?, me contestó mal, me dijo me sucede lo que a la mayoría de la gente, llevo tiempo sin trabajo y no es lo malo eso, me he cogido una depresión y estoy tomando pastillas que nunca las había tomado y con este invierno tan perro salgo a la calle a ver si soy capaz de tirar para adelante. Le dije » no te hundas» y para sacarle un poco de su mundo le pregunté ¿ qué tal andas de calmantes?, y me dijo » Alfonso se me están olvidando, lo primero con lo del trabajo la economía está mal y casi no pongo la calefacción, así que te vas a la cama la mujer fría y yo casi me tengo que meter con gabardina porque no entro en calor, así que nada de nada. Le dije lo siento chico porque si la carne no se toca no hay chispazo y a nosotros no nos va a pasar como al ladrón del Urdangarin con su socio Torres, despidiéndose en los emails, un abrazo el duque de Palma, Em…Pal…..Mado. Por eso iba el a Palma de Mallorca. No le hacían falta viagras, porque con el sol y el agua se las ahorraba, sio pendejo. Yo te hubiera mandado con los esquimales a ver como andabas.

Y amigo cuídate a ver si te ha cogido un psiquiatra viejo que lo mismo se le ha olvidado el sexo, te atiborra de pastillas y te está matando, te lo digo porque eso me paso a mí y hay que cascarlo. Porque si no fumas, no bebes, ni hay calmantes (que esto no nos cuesta) qué pintamos aquí, oír todos los días penas.

No hombre no. Un abrazo.

ALFONSO «EL PINDOQUE»

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