Besana Villoria – Revista digital Besana de Villoria

RECUERDOS DE LA ANTIGUA BESANA


El artículo que recordamos hoy se publicó en el año 1993 en el nº 15 de nuestra revista.
Han pasado casi 19 años desde que vio la luz este artículo pero si no ponemos la fecha y no conociéramos a quienes los escribieron pensaríamos que había sido escrito cualquier día de estos. Los que en su día redactaron este texto hoy están más cerca de los 40 que de los treinta, algunos y algunas respetuosos padres de familia. Otros solteros con o sin compromiso y todos ellos con un preocupación común: la juventud de aquellos años. Su propia juventud.

Y…DE ESTA JUVENTUD ¿QUÉ?

Tras terminar la semana, los jóvenes de Villoria se plantean la ruta a seguir, el qué hacer y por dónde ir en el esperado fin de la semana.

AÑOS ATRÁS.

Todos hemos oído aún, el pasado glorioso de Villoria, cuando esta villa era el centro de reunión de los pueblos vecinos, y no sólo los fines de semana nuestros jóvenes se movían, sino que las distintas actividades culturales existentes les ayudaban. Ellos van recordándonos con nostalgia, la sangre de Villoria, aún hoy y siendo jóvenes más adultos se asombran del paso generacional que los jóvenes de hoy hemos dado. Ya no nos ilusiona nada, el pueblo no nos tira para quedarnos, no funciona ningún grupo juvenil y después de todo esto, nos entra una duda razonable, y ¿Por qué?.
Quizás hoy se tienen más recursos, más posibilidades de salir, la juventud hemos caído en un pozo desilusión y monotonía un pozo del que es muy difícil de salir.

JUVENTUD HOY.

Llega el viernes, la rutina de la semana se rompe, algunos ya empiezan a salir, otros deseando que llegue el fin de semana pensamos: Otra vez lo mismo, el sábado a Peñaranda, o a Fuentesaúco, quizás a Salamanca, tal vez a Medina, y se repite a lo largo de todo el año. Gente desde los 17 años ya está cansada, otros anhelan salir pero cuando lo hacen se agobian, aunque claro está, todo es según te lo montes.
Motivaciones hay muchas, que cada uno deje volar su imaginación, pero ¿de qué vamos?. Nos avergonzamos de nuestras generaciones, que sólo viven de la música, esa música que solo es ruido y tontería, del alcohol, de esos estimulantes que nos van sumiendo en el más absoluto envejecimiento a nuestras edades.
Algunos son sinceros y comentan que nos les importaría no salir el fin de semana,, según ellos siempre es lo mismo, y admiten que nadie nos movemos para no hacer nada.

FUTURO.

Durante todo el año el buen observados se da cuenta en las pequeñas festividades, que la juventud en el pueblo no se lo pasa mal, e inclusive afirman que prefieren quedarse que aburrirse fuera, pues que nadie da el primer paso, nadie tira la primera piedra, esta vez para construir un mundo mejor, ya no para nosotros, sino para las generaciones venideras.
Debemos mover el teatro, Elaine, las tertulias y todas aquellas cosas que los jóvenes más adultos nos reprochan, y de los cuales debemos aprender. Villoria y su juventud no se merecen caer en la corriente de la superficialidad y del desinterés que flota en el ambiente.

Luis Fernando, Rita M. Barrera, Aranchi y Mónica Miguel, Hely Pérez, Agustín Lázaro y Oscar Sierra

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